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sábado, 16 de julio de 2016

La sociedad no está hecha para mí

Hasta hace algún tiempo había muchas cosas de la sociedad que, a pesar de que no me gustaban y no compartía su forma de ver la vida, parece que no me importaba.
Hoy por hoy, creo que esta sociedad no está hecha para mí.

Supongo que este cambio de pensamiento tiene mucho que ver con mi maternidad, que quizás me hace ver el mundo pensando en mis hijos y en su futuro.
Pero estoy segura de que mi mayor conocimiento e implicación con el islam, el sentirme cada día más y mejor musulmana, esa fe que crece continuamente; también hace que ciertas cosas hayan dejado de pasar desapercibidas para mí, hasta el punto de que creo que me molestan.

Soy hija de padre y madre fumadores, y bebedores; que viven de una forma totalmente diferente al modo de vida que yo elegí para mí. Y no me avergüenzo de decirlo, pues aunque es algo que no comparto, su manera de vivir o de ver la vida no tiene nada que ver en mi comportamiento y en mi manera de vivir o de educar a mis hijos.
Hasta hace poco, veía gente fumando y bebiendo y me era indiferente. No compartía esa forma de vivir, ni esa ideología; pero me daba exactamente igual puesto que no influían en mi vida ni en mi día a día.

A día de hoy, veo cosas que realmente me molestan y no puedo evitar que se me note en la expresión cuando estoy mirando.
Veo una mamá / abuela (y lo mismo para los hombres) paseando a su bebé en el carrito, jugando con ellos en el parque, etc. y llevan en una mano al niño/a y en la otra el cigarro. No juzgo, pero no entiendo y, sinceramente me molesta. No por lo que haga cada uno con su vida, sino porque ese cigarro está afectando también a los niños.
Voy a comprar y veo a esos niños/as con afán de ayudar a sus padres en la compra (al igual que hacen los míos), y al ver que con tanta naturalidad le dicen los padres a los hijos "pon aquí la cerveza", o a la inversa "¿pongo ya la cerveza, papá/mamá?". No sé, me paro a pensar si en la educación de esos niños entra que cuando sean adultos deben beber porque es lo que toman los adultos.

Y mientras tanto, los musulmanes y musulmanas, divididos en grupos:
- Unos, completamente insociables, al margen de la sociedad para que sus hijos/as y ellos mismos vivan en una burbuja sin despegarse del islam (que me parece estupendo), aún sabiendo que en unos años éstos serán más mayores y tendrán que convivir con el resto de la sociedad y afrontar los porqués que no han resuelto en su infancia.
- Otros, buscando la complacencia de la sociedad, abandonando la religión o innovando para ser más aceptados por la sociedad no musulmana, para que sus hijos e hijas no se sientan diferentes del resto de niños; sin pensar que están educando en una religión que no existe puesto que mezclamos un poco de cada creencia o forma de vida, y que luego no sabrán diferenciar lo que es o no correcto.

Y yo me pregunto, ¿dónde está el término medio? ¿qué educación les damos los padres a nuestros hijos (independientemente de religión)?

La hawla wa la quwata illa bi Allah

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